Como instalar una pileta (piscina) de fibra de vidrio

Durante los últimos años, la pileta de fibra de vidrio se ha instalado fuertemente en el mercado argentino. Esto sucede fundamentalmente por las innumerables ventajas que posee sobre la de hormigón.

Entre las más importantes, podemos mencionar el factor tiempo final de obra. En este sentido, una pileta de fibra de vidrio demora entre dos o tres días, en cambio para la de hormigón se necesitan al menos diez días hábiles. Sumado al tiempo, la de hormigón implica despliegue de material, mano de obra para la fabricación del hormigón, entre otras cuestiones propias de una obra de construcción.

Otro punto a favor de la pileta de fibra de vidrio es su menor costo en relación a la de hormigón.
Por otra parte, ante una misma dimensión de pileta, la de fibra de vidrio es altamente resistente a movimientos sísmicos, perfectamente adaptable a cualquier terreno, incluso ante grandes desniveles.

A continuación, te explicamos con imágenes muy ilustrativas el proceso de cómo se instala la pileta de fibra de vidrio.

Pileta de Fibra de Vidrio (PRFV)

1: BOMBA
2: FILTRO
3: SKIMER
4: RETORNOS
5: LLAVE DE 2 VÍAS
6: LLAVE ESFÉRICA
7: TOMA DE ASPIRACIÓN LIMPIAFONDO
8: VEREDA PERIMETRAL
9: BORDE Y SOLARIUM ATÉRMICO
10: LUMINARIAS SUBACUÁTICAS
11. ESCALERA

¿Qué quiere decir «PRFV»? Esta sigla corresponde a la abreviatura del término “Plástico Reforzado con Fibra de Vidrio”. Se trata de un material de excelentes propiedades que lo hacen ideal para la fabricación de piletas de natación. Dentro de las características más destacadas se encuentran su alta resistencia mecánica, flexibilidad, bajo peso, la impermeabilidad y su acabado superficial. Por todo esto el PRFV permite generar indistintamente diseños clásicos de formas rectas como también de formas curvas y circulares, logrando modelos diferenciados que cubren las diferentes expectativas y gustos de los clientes.

Gel Coat: un acabado de primera calidad proporciona buen brillo, color y mayor durabilidad.
Refuerzos: su correcta distribución determina la resistencia estructural y durabilidad de las piscinas.

Borda de piscina de PRFV con formato antífuga: garantiza que no haya filtraciones y permite un mejor asiento del borde atérmico.

1: PISCINA DE PRFV
2: BORDE ATÉRMICO
3: JUNTA
4: MORTERO DE ASIENTO
5: CONTRAPISO DE HORMIGÓN ARMADO
6: SUELO COMPACTADO

Día 1	Día 2	Día 3
Una vez elegido el sitio donde colocar la pileta, se debe plantear el perímetro de la misma y controlar los niveles, es decir, establecer la profundidad de la excavación. Se aconseja que la pileta quede elevada al menos unos 20 centímetros sobre el nivel del suelo. En este día se concretará la excavación y se realizará la denominada “cama seca”, que consiste en una mezcla con una parte de cemento por cada cuatro partes de arena.	En el segundo día, se procede a asentar la pileta sobre la “cama seca” y verificar los niveles. Una vez que los niveles sean los correctos, se efectúa el calzado. Este proceso comienza con el llenado de los primeros 20 centímetros de profundidad. Luego, se vuelven a verificar los niveles y se continúa el proceso de llenado y calzado de manera simultánea. Previo al calzado, se realiza la instalación del sistema de filtración.	Luego de haber calzado la pileta y que el suelo se haya compactado correctamente, se efectúa el contrapiso que servirá de soporte para el revestimiento atérmico. La colocación del mismo implica una serie de pasos que aseguran una terminación de buena calidad. Primero se debe realizar un planteo de la modulación de las piezas para determinar los cortes. Una vez realizado el replanteo, se procede a la colocación del borde comenzando por las esquinas y dirigiéndose al centro. Terminado el borde, se colocan las vueltas siguientes que corresponden a las piezas planas denominadas solárium. La cantidad de vueltas dependerá del proyecto y el ancho de vereda a alcanzar. Finalmente se realiza el tomado de juntas y el proyecto estará terminado.